viernes, 22 de febrero de 2019

Convento de San Esteban de Salamanca

El convento de San Esteban se comenzó a construir en 1524 por iniciativa del cardenal fray Juan Álvarez de Toledo, hijo del segundo duque de Alba. Las obras finalizaron en 1610. En su construcción participaron varios arquitectos, entre otros Rodrigo Gil de Hontañón. Se construyó en estilo renacentista, pero contiene elementos barrocos en su decoración escultórica y pictórica. Es uno de los símbolos arquitectónicos de la ciudad de Salamanca.

La fachada de la iglesia del convento de San Esteban destaca por su decoración.


El pórtico del convento se debe a Juan de Ribero Rada. Se levantó entre 1590 y 1592. Es de inspiración toscana: tiene forma de logia, compuesta por diez arcos de medio punto sobre columnas dóricas. Las enjutas están decoradas con medallones, obra de Martín Rodríguez. Su sobriedad contrasta con la decoración generosa de la fachada de la iglesia.

El pórtico del convento de San Esteban es de inspiración toscana.


Del convento destacan el claustro de Pocesiones o de los Reyes, el capítulo antiguo, el capítulo nuevo, la escalera de Soto y la sacristía.

El claustro de Procesiones o de los Reyes se inició en 1528 y se finalizó en 1544. Es obra de fray Martín de Santiago. El piso bajo consta de 20 arcos de medio punto renacentistas tratados a la manera gótica: cada arco está dividido por tres maineles con capiteles tallados con grutescos, monstruos y otros motivos. El espacio entre arcos está ocupado por medallones en los que aparecen profetas del Antiguo Testamento. En los pilares de las esquinas del claustro hay una hornacina con representaciones de la infancia de Jesús de Nazaret. La cubierta es una bóveda de crucería. El piso alto consta de 40 arcos de medio punto que descansan sobre pilastras de sección cuadrada. Los capiteles se decoran con esculturas de temática religiosa. El exterior está decorado con medallones en los que aparecen retratados guerreros, monjes y mujeres. Las pilastras se rematan con Hércules y Venus de cuerpo entero que portan florones y otros objetos.

El claustro tiene dos pisos: el inferior cuenta 20 arcos de medio punto con maineles y el superior 40 arcos de medio punto con medallones decorativos en las enjutas.


El capítulo antiguo se utilizó hasta 1634. Llama la atención el artesonado de madera de la techumbre.


Al capítulo nuevo se accede a través de la puerta barroca. Tiene forma de arco de medio punto, está enmarcada por pilastras estriadas, arquitrabe, friso, frontón curvo partido y cornisa, y rematada por un ático que contiene una hornacina con un San Esteban, escultura exenta, obra de Antonio de Paz.

La puerta de acceso al capítulo nuevo es de estilo barroco. Está coronada por una escultura que representa a san Esteban.


El capítulo nuevo es obra de Juan Moreno y Alonso Sardiña patrocinada por fray Iñigo de Brizuela, obispo de Segovia. Se construyó entre 1627 y 1634.

La escalera de Soto fue financiada por fray Domingo de Soto, teólogo y confesor de Carlos V. Se construyó entre 1553 y 1556. Su arquitecto es Rodrigo Gil de Hontañón. Está decorada con casetones floreados. Los muros de la escalera están decorados con medallones. La escalera está cubierta por una bóveda de crucería estrellada.

La sacristía fue patrocinada por fray Pedro de Herrera, prior del convento. La obra se inició en 1627. En el muro izquierdo de la sacristía se encuentra una escultura orante de fray Pedro de Herrera y enfrente su sepulcro. La sacristía está recorrida por arcos embebidos, pilastras estriadas con capiteles corintios, hornacinas con esculturas, frontones partidos, frisos decorados con motivos vegetales, pináculos y escudos de fray Pedro de Herrera. La sacristía está cubierta por una bóveda de medio punto con lunetos.

La iglesia fue patrocinada por fray Juan Álvarez de Toledo. La inició Juan de Álava en 1524 y la continuaron fray Martín de Santiago y Rodrigo Gil de Hontañón. Se inauguró en 1610.

La fachada es obra de Juan Antonio Ceroni. Está enmarcada por un arco de triunfo decorado con casetones de piedra al estilo milanés. En el primer piso, la puerta de acceso en arco de medio punto; el centro del segundo piso está ocupado por el relieve del martirio de san Esteban, muerto por lapidación; y en el tercer piso el Crucificado.

El centro de la fachada de la iglesia está ocupado por el relieve de la lapidación de san Esteban.


La iglesia tiene planta de cruz latina de una sola nave. Las dimensiones son grandiosas: 84 m. de longitud, 14,50 m. de ancho, 27 m. de alto en la nave y 44 m. en el cimborrio. Las cubiertas de la nave y el cimborrio son estrelladas.

El cimborrio está cubierto por una cúpula estrellada.


El retablo mayor de la iglesia se concluyó en 1693 en estilo barroco. Destacan las gigantescas columnas salomónicas recubiertas de pámpanos y racimos que amparan el tabernáculo central. Entre las columnas se cobijan las esculturas Santo Domingo de Guzmán y San Francisco de Asís. El retablo y las esculturas son obra de José de Churriguera. Corona el retablo el cuadro Martirio de san Esteban, de Claudio Coello.

Los retablos laterales también son barrocos. El retablo de la izquierda está dedicado a santo Domingo de Guzmán; la escultura del santo es obra de Salvador Carmona, y el cuadro que representa a santo Domingo y a san Francisco en oración es de Manuel Petit. El retablo de la derecha está dedicado a santo Tomás de Aquino; la escultura del santo es obra de José Larra Domínguez y los cuadros de Antonio Palomino.

De la iglesia conventual destaca el retablo mayor, de José de Churriguera. Se concluyó en 1693.


El coro se asienta sobre un arco escarzano. La balaustrada es de piedra. La sillería del coro es obra de Alonso de Balbás y fue finalizada en 1655. Juan de Mondravilla decoró la crestería de la sillería y realizó el facistol. El fondo del coro está decorado por el fresco La Iglesia Militante y Triunfante, de Antonio Palomino, fechado en 1705. La parte inferior está dedicada a la Iglesia Militante, representada por una mujer vestida de pontifical montada sobre una carroza; a su lado santo Tomás de Aquino; están representadas las tres virtudes teologales (Fe, Esperanza y Caridad) y las cuatro cardinales (Prudencia, Fortaleza, Templanza y Justicia); pisoteados por los caballos aparecen tres personajes que representan a la ignorancia, el error y la herejía; y bajo las ruedas del carro aparecen siete animales que representan los siete pecados capitales: el oso representa la ira, el avestruz la gula, el pavo la soberbia, el lobo la avaricia, la cabra la lujuria, el perro la envidia y la tortuga la pereza. La parte superior está dedicada a la Iglesia Triunfante, presidida por la Trinidad; destacan las figuras de la Virgen María, santo Domingo de Guzmán, san Esteban, san Juan Bautista y san Antonio de Florencia.

El fresco del coro La Iglesia Militante y Triunfante es de Antonio Palomino y se fecha en 1705.

viernes, 15 de febrero de 2019

Pórtico de la Majestad de la colegiata de Santa María la Mayor de Toro

Se desconoce al autor del pórtico de la Majestad de la colegiata de Santa María la Mayor de Toro; sin embargo, se sabe que fue Domingo Pérez quien se encargó de policromar el conjunto escultórico.

El pórtico de la Majestad se levantó en dos etapas y estilos artísticos; lo realizado entre 1230 y 1240 es de hechura románica y lo realizado entre 1284 y 1295 es de estilo gótico.

Pórtico de la Majestad, 1230-1240 y 1284-1295.
Estilos: Románico y gótico.
Técnica: Piedra tallada y policromada.
Temática: Religiosa.
Colegiata de Santa María la Mayor, Toro, España.


El diseño original del pórtico de la Majestad es románico; sin embargo, solo la parte inferior, la que se realizó entre 1230 y 1240, obedece a este estilo artístico. Son románicas las catorce columnas sobre el zócalo, presentan fuste liso y capiteles decorados con distintos motivos, desde vegetales a figurados, pero con predominio de los religiosos y moralizantes relacionados con los primeros años de la vida de Jesús de Nazaret, tales como la presentación de Jesús en el templo, Jesús entre los doctores, la matanza de los inocentes, los Reyes Magos camino de Belén y la Epifanía. Las columnas exteriores ofrecen un grosor superior a las demás.

Hubo que esperar al reinado de Sancho IV (1284-1295) para que se reanudasen las obras del pórtico de la Majestad, lo que explica que se abandonase el diseño románico y se adoptase el estilo gótico. Así, la mayor parte de la obra está realizada en este estilo, como se pone de manifiesto en la factura en arco apuntado del tímpano y las arquivoltas.

Sobre las columnas románicas se situaron ocho figuras de bulto redondo, cuatro a cada lado, bajo doseletes en arco apuntado. Los personajes guardan relación con el linaje de David, y son de izquierda a derecha: un arcángel sin identificar, el profeta Isaías, el profeta Daniel, el rey Salomón, el rey David, el profeta Jeremías, el profeta Ezequiel y el arcángel san Gabriel.

Sobre la columna del parteluz descansa una imagen de la Virgen María con el Niño Jesús. La Virgen sostiene al Niño con su brazo izquierdo y con la mano derecha sujeta una flor. El Niño Jesús aparece sedente y bendice con la mano derecha. No hay comunicación entre la Virgen y el Niño Jesús y ambos muestran cierto hieratismo, lo que pone de manifiesto las reminiscencias románicas del primer gótico. Cubre la imagen de la Virgen con el Niño Jesús un doselete gótico.

El dintel está ocupado por la Dormición de la Virgen. La Virgen dormida, es decir, ya muerta, aparece tumbada en una cama. Sobre ella dos ángeles ayudan a que suba a los cielos el alma de la Virgen; esta mira de frente al espectador. A los pies de la Virgen se reconoce un ángel turiferario. El resto del dintel está ocupado por los apóstoles; se reconocen a san Juan Evangelista, junto a la Virgen y con la cabeza apoyada en una mano, a san Pedro por llevar las llaves del paraíso y a santo Tomás, que porta el cinturón de la Virgen María. Todas las figuras aparecen bajo doseletes trilobulados. El dintel descansa sobre cuatro mochetas en las que aparecen cuatro músicos.

El tímpano está dedicado a la Coronación de la Virgen. La Virgen aparece sentada y orante en el momento en el que su hijo Dios la corona como reina de los cielos. Jesús aparece sedente, coronado, coronando a su madre con la mano derecha y con la mano izquierda sujeta un libro abierto. Dos ángeles con una rodilla en el suelo portan sendos cirios y flanquean la escena principal. Otros dos ángeles de menor tamaño portan incensarios.

El dintel del pórtico de la Majestad de la colegiata de Santa María la Mayor de Toro está ocupado por la Dormición de la Virgen y el tímpano por su Coronación.


Alrededor del tímpano se despliegan siete arquivoltas. Las muchas figuras que ocupan las arquivoltas se disponen siguiendo el sentido de las mismas y están cubiertas con doseletes trilobulados. Solo las figuras de la séptima arquivolta aparecen dispuestas en sentido radial.

La primera arquivolta está ocupada por ocho ángeles que apoyan una rodilla en el suelo, unos portan candelabros, otros incensarios y el central una corona.

En los extremos de la segunda arquivolta aparecen san Pedro y san Pablo y entre ellos ocho figuras de reyes o bienaventurados.

La tercera arquivolta está ocupada por doce figuras de mártires y santos varones.

En la cuarta arquivolta aparecen catorce figuras de confesores, abades y obispos.

En la quinta arquivolta se cuentan dieciséis figuras de vírgenes y mujeres mártires.

La sexta arquivolta está ocupada por dieciocho figuras de músicos coronados.

En las claves de las arquivoltas segunda, tercera, cuarta, quinta y sexta aparecen ángeles rezando.

La séptima arquivolta es la más importante en cuanto al despliegue iconográfico. Se desarrollan los temas del Juicio Final, el cielo, el purgatorio y el infierno. En la clave central se reconoce a Cristo Juez en Majestad entre dos ángeles que le sostienen en brazos; muestra las heridas de la crucifixión. Está flanqueado por la Virgen María y san Juan, presentados como intercesores. Junto a la Virgen María un ángel porta la cruz de Cristo y la corona de espinas. Junto a san Juan un ángel porta unos clavos y una lanza, instrumentos de la Pasión de Cristo. A continuación se narra el Juicio Final; unas figuras desfilan hacia el cielo, entre las que se reconoce a san Francisco de Asís; otros marchan hacia el infierno conducidos por demonios que los maltratan, los condenados llevan los símbolos de sus pecados.

El pórtico de la Majestad de la colegiata de Santa María la Mayor de Toro presenta una parte románica, pero hay que considerarla gótica por cuanto la mayor parte de la obra lo es en cuanto espacio ocupado y tratamiento dado a las figuras. Aunque en la figura de la Virgen con el Niño, dispuesta sobre el parteluz, se reconocen reminiscencias románicas, el dinamismo del resto de las figuras que aparecen en el pórtico es típico del primer gótico.

viernes, 8 de febrero de 2019

Mujer sentada, de Juan Gris

Juan Gris (Madrid, España, 1887-Boulogne-sur-Seine, Francia, 1927) destacó como pintor cubista. Se formó en la Escuela de Artes y Manufacturas de Madrid y en el estudio de José Moreno Carbonero. Trabajó como ilustrador en las revistas Blanco y Negro y Madrid Cómico. En 1906 viajó a París, donde conoció a Picasso, Braque y Léger. En 1912 se inició en el cubismo. En 1916 firmó un contrato con el marchante Léonce Rosenberg, lo que le permitió exponer en la galería l’Effort Moderne de París. Entre sus obras más destacadas hay que citar Retrato de Picasso (1912), Mujer sentada (1917) y Guitarra y mandolina (1919).

Juan Gris: Mujer sentada, 1917.
Estilo: Cubismo.
Técnica: Óleo sobre lienzo.
Temática: Retrato.
Dimensiones: 116 x 73 cm.
Museo Nacional Thyssen-Bornemisza, Madrid, España.


Mujer sentada se trata de un retrato de su compañera Josette Gris a partir de los muchos dibujos que de ella hizo Juan Gris en 1916 y que le sirvieron como boceto para pintar este cuadro.

Josette Gris aparece sentada en una silla. Resulta una figura estilizada. Las formas en las que se descomponen Josette Gris y la silla permiten reconocer ambas figuras. Unas finas líneas blancas permiten resaltar rasgos del rostro –cejas, nariz, ojos y boca– y detalles de la blusa de la mujer. Llama la atención el contraste entre los ojos de la mujer, uno es un punto blanco y el otro una mancha negra. También es negro el cabello de Josette Gris.

La descomposición y superposición de algunos de los planos hace que se confundan la figura y el fondo del cuadro.

La paleta de colores es escasa –blanco, gris, negro, ocre y violeta–, aunque pueda parecer lo contrario por la amplia gama de tonos.

Las luces y las sombras vienen marcadas por los diferentes tonos de color.

En Mujer sentada se aprecia la influencia de Corot, Cézanne y Picasso. De Corot toma el contraste entre líneas rectas y curvas y el juego de luces y sombras; de Cézanne el punto de vista alto; y de Picasso el planteamiento intelectual de la obra, que lo pone en relación con el cuadro La italiana (1917). Sin embargo, hay una salvedad, Josette Gris no viste como una campesina y sí como una dama parisina de su tiempo.

Mujer sentada es una obra que muestra la característica principal que define al cubismo sintético, la descomposición de las figuras en número de planos no excesivo y que permite al espectador recomponer las figuras y hacerlas reconocibles.

viernes, 1 de febrero de 2019

Salvador Dalí Museum

El Salvador Dalí Museum de Saint Petersburg, en Florida, EE.UU., se inauguró en 1982. Sus promotores fueron el matrimonio Morse. La relación del matrimonio con la obra de Dalí comenzó en 1942 cuando asistieron a una exposición del pintor organizada por el Museo de Arte de Cleveland. Al año siguiente comenzaron a comprar obras de Dalí. En 1965 llevaron a cabo una retrospectiva de Dalí con las cerca de doscientas obras que poseían. El éxito de la exposición les llevó a pensar en abrir un museo que reuniese las obras que poseían de Dalí y las que fuesen a comprar del artista. En 1971 abrieron un primer museo en Beachwood, Ohio. El actual Salvador Dalí Museum se inauguró en 1982, después de rehabilitar unas bodegas abandonadas.

Persistencia de la memoria (1949) es la joya más valorada de las que se conservan en el Salvador Dalí Museum de Saint Petersburg, Florida.


Las más de 2.000 obras incluyen acuarelas, dibujos, esculturas, fotografías, grabados, joyas, libros ilustrados y óleos, además de manuscritos y documentos generados por Dalí. Entre las obras más destacadas hay que citar la joya Persistencia de la memoria (1949) y los lienzos El descubrimiento de América por Cristóbal Colón (1959) y Retrato de mi hermano muerto (1963).

Retrato de mi hermano muerto (1963) es una de los cuadros más perturbadores de Dalí. Se conserva en el Salvador Dalí Museum de Saint Pertersburg, Florida.