sábado, 31 de enero de 2015

Juan de Villanueva

Juan de Villanueva (Madrid, 1739-ídem, 1811) es uno de los arquitectos más representativos del neoclasicismo en España. La Real Academia de San Fernando le pensionó para que estudiase en Roma entre 1758 y 1765. A su regreso a España fue nombrado académico de Mérito de la Real Academia de San Fernando y en 1768 arquitecto de la comunidad de monjes jerónimos del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, lo que le permitió conocer y estudiar la obra de Juan de Herrera. Carlos III le nombró arquitecto del príncipe y de los infantes en 1777 y en 1781 arquitecto mayor del rey, encargado del Real Sitio de El Escorial. Trabajó casi en exclusiva para la Casa Real Española desde 1769 y la mayoría de sus edificios se encuentran en Madrid.

El Museo del Prado (1785) es la obra maestra de Juan de Villanueva y del arte neoclásico español.


Juan de Villanueva fue el arquitecto que mejor supo trasladar a España los principios y valores de la arquitectura neoclásica que se estaba desarrollando en Europa. Sus edificios se distinguen por la severidad, el sentido de la proporcionalidad, el predominio de la línea recta, la simetría y el empleo de elementos constructivos de corte clásico.

Las primeras obras de Juan de Villanueva fueron la finalización de la Lonja del Real Monasterio de San Lorenzo de El Escorial (1768), la Casa de los Infantes y de la Reina en San Lorenzo de Escorial y el Ayuntamiento de Haro, ambos de 1769, y la Casita de los Infantes en Aranjuez (1771). Después vinieron sus grandes obras.

La Casita de Arriba (1773) fue la casa de descanso del infante don Gabriel de Borbón en San Lorenzo de El Escorial. Fue pensada para acoger conciertos de música de cámara. Es de planta cuadrangular, con un espacio central rodeado de otros espacios cuadrangulares; sobre el espacio central hay una segunda planta a la que se accede por una escalera de caracol. Cuenta con jardines de estilo italiano en terrazas descendentes.

La Casita del Arriba (1773) fue la primera gran obra de Juan de Villanueva.


 La Casita de Abajo (1775) fue la casa de recreo de don Carlos, Príncipe de Asturias, en San Lorenzo de El Escorial. En el año de su inauguración contaba con un solo bloque rectangular con una fachada de 27 m. En 1784 se abrió un ala posterior. Presenta dos plantas. Tiene jardines delante y detrás, que se comunican por dos pórticos de columnas toscanas.

La Casa del Príncipe (1784) fue el pabellón de caza de don Carlos, Príncipe de Asturias, junto al Palacio Real de El Pardo. En su hechura la línea horizontal se impone a la vertical. A los pies de la fachada principal se extienden unos jardines en plano hipodámico.

El Oratorio del Caballero de Gracia (1782), en Madrid, se presenta diáfano y monumental a pesar de ocupar un solar estrecho y alargado. Consta de nártex, coro sobre el nártex, nave basilical, falsas naves laterales delimitadas por doce columnas de orden corintio, crucero de planta elíptica con cúpula sobre pechinas y linterna, ábside y dependencias anexas. La bóveda de cañón que cubre la nave principal y la bóveda de cuarto de esfera que cubre el ábside están decoradas con casetones.

El Oratorio del Caballero de Gracia (1782) es uno de los muchos edificios de Juan de Villanueva que embellecen Madrid.
  

El Museo del Prado, edifico Villanueva, (1785) culminó el proyecto del Salón del Prado en Madrid. Está formado por un cuerpo central de planta rectangular terminado en ábside; desde los laterales parten dos galerías alargadas que finalizan en sendos pabellones cuadrados. Las dimensiones son de 202 x 36 m. Del edificio destaca el cuerpo central por su pórtico de acceso, que se adelanta al resto del conjunto; cuenta con seis columnas toscanas de orden gigante, entablamento, cornisa y ático rectangular, que acoge un friso escultórico alegórico de Fernando VII como protector de las ciencias, las artes y la técnica, obra de Ramón Barba. De las tres plantas las dos primeras son originales; en la inferior se alternan ventanales alargados terminados en arco de medio punto con hornacinas que acogen esculturas; la segunda es una galería de columnas jónicas; en el interior la techumbre es abovedada.

El Observatorio Astronómico de Madrid (1790) presenta planta cruciforme con salón central; la fachada principal es un pórtico hexástilo de orden corintio; corona el edificio un templete circular de orden jónico.

El Observatorio Astronómico de Madrid (1790) presenta un pórtico hexástilo de orden corintio.
  

Otras obras importantes de Juan de Villanueva son el Real Jardín Botánico de Madrid (1774), la Real Academia de la Historia en Madrid (1788), la Escuela de Guardamarinas de Cartagena (1789), la reconstrucción de la Plaza Mayor de Madrid (1791) y el Teatro del Príncipe en Madrid (1804).

sábado, 24 de enero de 2015

Museo Nacional Colegio de San Gregorio

El Museo Nacional Colegio de San Gregorio de Valladolid alberga esculturas desde la Baja Edad Media hasta principios del siglo XIX, además de pintura barroca. El complejo museístico está integrado por el Colegio de San Gregorio, el palacio del marqués de Villena, la Casa del Sol y la iglesia de San Benito el Viejo.

Entre las esculturas más representativas del Renacimiento español y del Museo Nacional Colegio de San Gregorio está La Sagrada familia de Diego de Siloé.


El ahora Museo Nacional Colegio de San Gregorio nació en 1842 como Museo Provincial de Bellas Artes de Valladolid con fondos de los conventos y monasterios suprimidos en 1836 por la desamortización de Mendizábal. En 1933 la II República lo elevó a la categoría de Museo Nacional de Escultura a iniciativa del historiador y Director General de Bellas Artes don Ricardo de Orueta. La colección se instaló en la nueva sede del Colegio San Gregorio. La colección se amplió con obras procedentes del Museo Nacional del Prado. Durante la dictadura del general Franco el museo adoptó el nombre de Museo Nacional de Escultura Religiosa. En 1992 se incorporó como sede del museo el palacio del marqués de Villena y en 1999 la Casa del Sol y la iglesia de San Benito el Viejo. Entre 2001 y 2006 se rehabilitó el Colegio San Gregorio. En 2008 se adoptó la denominación Museo Nacional Colegio de San Gregorio. El 18 de septiembre de 2009 tras su remodelación integral y ampliación de la colección el museo se abrió de nuevo al público.

Magdalena penitente de Pedro de Mena es una de las esculturas del Barroco español que alberga el Museo Nacional Colegio de San Gregorio.


El Museo Nacional Colegio de San Gregorio se ocupa de custodiar, conservar, restaurar, investigar y dar a conocer los fondos artísticos y documentales que atesora, que se caracterizan por:
·         Preeminencia de la escultura religiosa de los siglos XV al XVIII.
·         Diversidad de tipología: escultura exenta, retablos, sepulcros y relieves.
·         Preeminencia de la talla en madera policromada.

Entre los fondos del Museo Nacional Colegio de San Gregorio destacan el Retablo de San Jerónimo de Jorge Inglés, de estilo gótico; la Sagrada Familia de Diego de Siloé, la Virgen con el Niñó de Felipe Vigarny, el Sacrificio de Isaac de Alonso de Berruguete y El entierro de Cristo de Juan de Juni, todos del Renacimiento; y del Barroco El Cristo yacente y La Piedad de Gregorio Fernández y Magdalena penitente de Pedro de Mena. Además, el museo alberga una parte importante de la escultura procesional de Valladolid, que cede a las cofradías en Semana Santa.

sábado, 17 de enero de 2015

El milagro del pozo, de Alonso Cano

Alonso Cano (Granada, 1601-ídem, 1667) fue arquitecto, escultor y pintor barroco. Como pintor se formó en el taller sevillano de Francisco Pacheco a partir de 1615. Además, estudió a Velázquez y Tiziano. En 1624 obtuvo el título de Maestro Pintor por San Francisco de Borja. En 1638 se instaló en Madrid y el conde-duque de Olivares le nombró Pintor de cámara del rey Felipe IV. Entre sus cuadros destacan El milagro del pozo (1640), Inmaculada Concepción (1648) y San Jerónimo penitente en el desierto (1660).

Alonso Cano: El milagro del pozo, 1640.
Estilo: Barroco.
Técnica: Óleo sobre lienzo.
Temática: Religiosa.
Dimensiones: 216 x 149 cm.
Museo Nacional del Prado, Madrid, España.

  
Se dice que el hijo de san Isidro labrador y santa María de la Cabeza cayó a un pozo mientras sus padres trabajaban. La santa pidió a su marido que salvase al hijo de ambos. El santo pidió a la Virgen María que intercediese ante el Señor con el fin de conseguir la salvación del niño. Entonces las aguas del pozo comenzaron a subir y el niño salvó la vida. Alonso Cano eligió el momento en el que el hijo de los santos ya estaba a salvo en brazos de su madre.

La composición gira alrededor del niño y su madre, en el centro del lienzo, a la izquierda el santo, de pie, sujetado un rosario que ase su hijo, dos mujeres, dos niños y un perro completan la escena. Los niños y el perro disfrutan del agua. Parecería una escena de género si no fuese por el nimbo que adorna a san Isidro labrador.

La pincelada es suelta al modo velazqueño, lo que rompía con la tradición sevillana de Alonso Cano de pincelada definida.

La gama cromática es escasa, predominando el pardo en diversas tonalidades, además del rojo del vestido de santa María de la Cabeza, el blanco y el amarillo.

La luz está difuminada envolviendo a las figuras, al modo veneciano por influencia de Tiziano, y disminuye desde el centro del lienzo hacia el exterior.

El cuadro lo encargó la reina Isabel de Borbón, esposa de Felipe IV, para coronar el retablo mayor de la iglesia de Santa María de la Almudena, donde permaneció hasta su demolición en el siglo XIX. Entonces pasó a la iglesia del Sacramento. Por último, en 1941 engrosó los fondos del Museo Nacional del Prado.

sábado, 10 de enero de 2015

Ecce Homo, de Alonso de Berruguete

Alonso de Berruguete (Paredes de Nava, 1490-Toledo, 1561) inició su formación a la sombra de su padre, el pintor Pedro de Berruguete, y la continuó en Italia entre 1506 y 1517, donde conoció a Lippi, Bramante y Miguel Ángel. A su regreso a España contribuyó a la modernización de la escultura hispánica e introdujo el manierismo. Entre sus obras más destacadas hay que citar Ecce Homo (1525), Martirio de san Sebastián (1526) y Sacrificio de Isaac (1526).

Alonso de Berruguete: Ecce Homo, 1525.
Estilo: Manierismo.
Técnica: Madera policromada.
Temática: Religiosa.
Dimensiones: 146 x 58 x 48 cms.
Museo Nacional Colegio de San Gregorio, Valladolid, España.

  
El Ecce Homo, de Alonso de Berruguete, se inspira en el Evangelio de Juan 19, 4. Cristo porta símbolos de la Pasión, caso de la soga al cuello y el manto rojo. Recoge el momento en el que tras el dolor físico se abre paso el moral.

Se trata de una escultura de bulto redondo, pensada para ser observada desde todos los puntos de vista. Está realizada en madera policromada; la pintura servía para ocultar la pobreza del material utilizado, embellecer la figura y ganar en expresividad.

El estilo es manierista por cuanto la expresividad está basada en la distorsión, la inestabilidad y el alargamiento de la figura. Busca la emotividad en el creyente que observa la imagen. La fragilidad de Cristo se subraya mediante la delgadez de los miembros y su pose casi imposible de la figura, que se manifiesta mediante la largura de la pierna izquierda, cruzada sobre la derecha, lo que produce una sensación mixta de caída e ingravidez, el cruce de los brazos y un gesto lánguido. La inestabilidad se compensa mediante el manto, que hace las veces de soporte de la figura.

El Ecce Homo, de Alonso de Berruguete, contribuyó a la modernización de la estatuaria española por cuanto la introdujo en el movimiento manierista y la situó en la antesala del espíritu contrarreformista.

viernes, 2 de enero de 2015

San Juan de Baños

La iglesia de San Juan Bautista, más conocida como San Juan de Baños, se encuentra en Baños de Cerrato (Palencia). La consagró el rey visigodo Recesvinto en 661. Así se recoge en una inscripción latina que dice:

“PRECURSOR DNI MARTIR BABTISTA IHOANNES POSSIDE CONSTRUCTAM IN ETERNO MUNERE SEDE QUAM DEVOTUS EGO REX RECCESVINTHUS AMATOR NIMINIS IPSE TUI PROPIO DE IURE DICAVI TERTII POST DCM REGNI COMES INCLITUS ANNO SEXCENTUM DECIES ERA NONAGESIMA NOBEM”,

que se puede traducir por:

“Oh, Juan Bautista, mártir precursor del Señor, posee como obsequio eterno este templo, que yo mismo, devoto rey Recesvinto, amador de tu nombre, te dediqué de lo mío propio, en el año tercero, después del décimo en que fui compañero ínclito del Reino. En la era seiscientos noventa y nueve”.

El año 699 de la era hispánica equivale al 661 de la cristiana debido a que los visigodos añadían 38 años a la era cristiana. Es por ello que la iglesia de San Juan de Baños es la iglesia española más antigua de las que se conservan en pie.

A la iglesia de San Juan de Baños se accede a través de una portada en arco de herradura visigodo.


La iglesia de San Juan de Baños presenta planta trapezoidal, más ancha en la cabecera. Un atrio precede a la nave central, separada de las laterales por arcos de herradura visigodos sobre columnas de capiteles corintios. Las naves cuentan con tres tramos antes del brazo de crucero, que sobresale de los muros de cierre del brazo mayor. La cabecera presenta tres ábsides separados de planta rectangular, el central cubierto con bóveda de cañón de sección en herradura, y los laterales cubiertos con bóveda de crucería, fruto de una reforma gótica.

La iglesia de San Juan de Baños presenta planta trapezoidal con atrio, tres naves, crucero y tres ábsides.

  
El templo tiene un único acceso a sus pies en arco de herradura visigodo, que excede en 1/3 el radio del arco. El borde exterior de las dovelas está decorado con círculos tangentes que forman flores cuadripétalas. La dovela central está decorada con una cruz patada. Está coronado por una espadaña añadida a mediados del siglo XIX.

El ábside central se presenta como un arco de triunfo. Tiene forma de arco de herradura visigodo. Descansa sobre una línea de imposta decorada, igual que la moldura exterior de las dovelas del arco, con motivos vegetales. La clave está decorada con una cruz con disco central y brazos ensanchados y rematados con volutas. Sobre el arco la inscripción en la que se informa de la consagración del templo por Recesvinto.

La iluminación del templo se consigue a través de vanos de hechura visigoda,  uno de ellos en el ábside central, decorados con un sogueado que los rodea y con una cenefa en las dovelas de apoyo.

El ábside central de la iglesia de San Juan de Baños presenta una cubierta en bóveda de herradura.

  
En diversos lugares del interior y exterior del templo se repiten motivos decorativos geométricos y vegetales.

El material de construcción son sillares de granito a hueso, sin argamasa, dispuestos a soga y tizón.

La iglesia de San Juan de Baños fue declarada Monumento Nacional en 1897.