Manuel González Martí inició su
colección de cerámica en 1895. En los años veinte y treinta del siglo XX su
colección era visitada como Museo de Cerámica de Valencia. En los años cuarenta
se marcó los objetivos de recuperar las piezas incautadas durante la Guerra Civil (1936-1939) por el
Gobierno de la II República
y crear el Museo Valenciano de Cerámica. Él y su esposa Amelia Cuñat decidieron
donar su colección al Estado español a condición de que no saliese de la ciudad
de Valencia. El 7 de febrero de 1947 se creó por decreto el Museo Nacional de
Cerámica con Manuel González Martí como director vitalicio. Desde 1954 la sede
del Museo Nacional de Cerámica es el Palacio del Marqués de Dos Aguas. Los
fondos del museo se ampliaron con colecciones diversas, desde mobiliario a
pintura, transformándose en el Museo
Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí.
Panel de azulejos de
cocina valenciana del siglo XVIII.
La colección
de cerámica reúne más de 5.000 piezas. Destaca la cerámica de Paterna del siglo
XIII; los socarrots, placas
decorativas para el techo, de los siglos XIV y XV; la cerámica de Manises del
siglo XV, conocida como obra daurada;
la cerámica de la Real Fábrica
de Alcora, fundada en 1727 por el conde de Aranda; la loza dorada del siglo XVIII, que refleja la influencia de la
orfebrería; las vajillas idílicas del
siglo XIX, en las que se reproducía el ajuar de la novia; la azulejería de
estilo pictoralismo cerámico del siglo XIX de los artitas Rafael Monleón y
Francisco Dasí, que reproducían en la loza las mismas calidades que sobre un
lienzo; las lozas utilitarias de Manises
del siglo XIX, que imitaban las lozas de
Bristol o de pedernal decoradas
con transferencias impresas de manera calcográfica; la cerámica modernista de
finales del siglo XIX, inspirada en la cerámica medieval; y las cerámicas de
Alfonso Blat y Pablo Picasso, de mediados del siglo XX.
Entre los
fondos pictóricos hay cuadros de Pascual Capuz, Antonio Esteve y Pinazo
Camarlech.
De las
colecciones textiles destacan los chalecos y casacas de seda del siglo
XVIII, además de vestiduras litúrgicas,
trajes militares y disfraces.
También hay
colecciones de carrozas, joyería, mobiliario y orfebrería, y los archivos y
bibliotecas de Manuel González Martí y Mario Blasco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario